Anaïs Vila, entrevista con Mondo Sonoro (2024)

Después del inicio un Anaís Vila llega a la redacción de la revista, es pedirle perdón por el retraso va realizar esta entrevista. Necesito editar “Ara siempre” (Temps records, 24) y hemo tardado en proceso de que sus doce canciones reposadas se instalaran en nuestros corazones. Eso sí, una vez lo han hecho, no hay vuelta atrás y el efecto balsámico de su música perdurará en el tiempo.

charles con Anaís Vila es hacerlo con una cantautora que ve las cosas desde un prisma distinto al que suele ser adventual. Vista es interesante por su diversidad. Y es que su mirada posee tres aristas muy diferentes, que conviven a la vez en eso que todos conocemos como Industria. Por lo tanto, Anaïs aporta la Sabiduría de la Profesora que da Classes de canto y songwriting y tiene contacto directo con el entusiasmo de la juventud que empieza en este negocio. Otro, puede aportar la visión de alguien que ata inmersa como instrumentista en grandes giras de un artista tan popular y masivo como Joan Dausá. Y por último, tiene la visión de una cantautora que, con una década de carrera y cuatro discos en su haber, no ha logrado todava obtener el reconocimiento que, al menos desde este medio, pensamos que se merece. Y máximo cuando ha editado un último trabajo titulado “Ara siempre” (Temps records, 24), que tiene el intenso aroma de las cosas que a exclusivas para el mero hecho de ser sencillas. Un disco que ella misma califica de super honesto y en el que sentía la necesidad de que todo estuviera tocado tal cual: sin filteros ni añadas. Puedes comparar estas referencias Adrianne Lenker decir El gran ladrón él Aldous Hardingque le han acompañado durante estos últimos meses. Además, y esto esto inédito en su trayectoria, por primera vez están destacándose como varias plataformas de streaming, las escuchas de tres singles suyos: “Loop”, “Desert” (junto al). Mishima David Caraben) y -mi preferido- “Un vici”. Y eso que ella siempre ha creído, y sigue creyendo, en el álbum como un todo.

“El único consejo que doy a los estudiantes es que disfruten el viaje”

En el panorama del indie-folk catalán, Anaïs Vila no está en el enclave. Mejor editar “Contradicciones” (Temps récords, 20), en este álbum, los listillos de la clase se apresuraron en etiquetarla dentro del 'pop metafísic', como si eso tuviera en sí mismo algún significado. En el fondo no dejaba de ser una tontería, como otro cualquiera, que solo habría tenido sentido si le hubiera garantizado una atención mayor de la que obtuvo. A pesar de esto. Y me temo que así seguimos y seguiremos porque, como ella misma afirma con cierta sorna, “En cuanto al fondo, underground soy más que nadie, porque no acabo de encajar en ningún lado”. Pues no deja de ser una lástima porque, si al leer este artículo cualquiera de vosotros tuviera la noble ocurrencia de acercarse a las canciones de “Ara siempre”, se asomarían a un album de una intimidad y belleza poética abrumadora, que se mueve entre lo críptico y lo directo, con unas letras que hablan de nuestra relación con nuestro entorno (“Desert” “L'altra también”), pero dela Moral ( Tiene significado el autoconfinamiento, “Com una flor”), o conexión vital con el infinito (“Cendres”, “Un Vici”). Solo le ha faltadometere en el militante mundo de la conciencia social y política: “No I o planteado hacer nunca canción protesta, porque en el fondo soy la primera a la que no le gusta decirle a la gente cómo tienen que pensar… Pero antes de mí no hay nada, nada para mí ha salido o Nada fue así que se pudiera comprobar el filtro necesario… No había un contenido profundo del discurso político. Hay mucha música que le pone mucho énfasis a la estética y muy poco al elemento discursivo, que es muy importante y aún más en la música de autor. De hecho hay mucha música a la que estamos etítico etiquetando como de autor y en el fondo tiene un discurso muy vacío. Bu creo que se ha de defundizar mucho más en el discurso, escojas el tema que escojas”.

A todo lo escrito hasta ahora cabe adder la importante para cualquier autor que se precie por encontrar una voz propia. Una vez más, tiene características distintivas. Algo que Anaïs procura inculcar como alumnos desde su modesto pulpito como profesora de composición. “El único consejo que les doy a alumnos es que disfruten del camino. Porque, si yo sigo tocando, a pesar de todas las dificultades y de los pocos espacios que hay para tocar, es porque los músicos disfrutamos desde el minuto uno del echo de coger nuestro instrumento y empezar a crear. Disfrutámos de todo el proceso. Sin embargo, sólo puedo conseguir un producto y un resultado económico para mí. Estoy muy contento”. Nunca, nunca deja de ser curioso que de nuestras escuelas de música salgan tan buenos instrumentistas, pero tan pocos creadores. Nada, porque no existe un noble arte de hacer canciones. De hecho la propia Anaïs me cuenta que ella tuvo que irse un año a la prestigiosa escuela LIPA de Liverpool, porque aquí aquí aquí no existía la posibilidad de trabajar en ese campo. “No hay ningún problema con escribir canciones. Yo me tuve que ir fuera para aprender y es extraño que en las escuelas de música tan prestigiosas que tenemos, salgan unos músicos estupendos, pero luego salgan tan pocos creadores. Y creo que es porque no se está está incentivando la creatividad. Y cuando uno se centra en estudiar tanto sobre cosas que ya están hechas, después le cuesta mucho crear cosas propias. El garaje del garaje o de otra persona, sin tanta formación y sin ningún prejuicio, sacar sus propias composiciones”. Anaïs sabe muy de lo que habla y es una lástima que su voz no tenga una mayor difusión tanto en medios como en festivales o ciclos. Su singular y bello trabajo para mí lo merece.