El Atlético tuvo problemas con Simeone.

Tropezón tras tropezón, el Atlético de Madrid se está quedando sin argumentos, y sin identidad. Había quién se consolaba en el club rojiblanco, ya se sabe eso de que quién no lo hace es porque no quiere, sosteniendo que a pesar de todo era el único equipo invicto de LaLiga (en Champions ya contabilizaba dos partidos perdidos) tras diez jornadas. Pero poco duró el argumento, porque a la 11ª cayó el registro, y lo hizo a lo bestia, con una derrota en casa del Betis que fue mucho más abultada en las formas de lo que refleja el marcador (1-0) y que desnuda al completo todas las carencias del un equipo, el de Diego Pablo Simeone, carente a estas alturas de identidad.