Ninguno de los cánceres es rosa, las mujeres tampoco.

Ninguno de los cánceres es rosa, las mujeres tampoco.

el cancer de mama es el tipo de tumor más frecuente entre las mujeres y la primera causa por la que mueren en España cuando hay un diagnóstico de 2023, casi 100.000 en la última media. Ser mujer es el principal amigo de riesgo para tener un cáncer de mama y morir de él; hombres, el porcentaje de casos es del 1,5% total. Para monitorear una advertencia perfecta; aunque también es importante saber que es tasa de supervivencia se mide a cinco años, que es el tiempo que duran los tratamientos de mantenimiento, normalmente la hormonoterapia. Pasado ese tiempo, cuando ya no hay tratamiento de mantenimiento, la mortalidad de aquellos que han pasado un cáncer de mama aumenta. Tanto, que la comunidad médica empieza a alargarlos hasta los siete, los 10 años, para evitar las recaídas, las recidivas, las metástasis en otoros órganos de nuestro cuerpo: cerebro, pulmón, huesos sonosscunt. La metástasis del cáncer es incurable y produce una neutralización del 30% de la metástasis original. Si no, es muy importante para mí, pero para mí nada. Egoístas, inmortales y viajeras, así son las célús de cáncer (libros magros de Carlos López-Otín)

Duelo de cáncer física y emocionalmente. La causa del cáncer, mar madre, páncreas, cerebro y pulmón es una de las experiencias más dolorosas y duras por las que puede pasar una persona y su gente querida. Quizás por eso tengo tanto miedo de nombrar la palabra cáncer, porque por eso tengo miedo al estigma, tengo miedo de que haya algo personal en ello y he dejado de hacerlo. Se reduce completamente a la culpa. Miedo, culpa y también desconocimiento; Mejor dicho, ignorancia. Qué poca información clara y acequible tenemos las mujeres diagnosticadas de mamá. Esta no se ofrece, hay que buscarla, porque existir, existe, y es muy útil para hacer frente a los tratamientos, sus efectos secundarios, el pánico, las cicatrices y otras huellas que deja la enfermedad pasada la quimioterapia, la la terapia, jajaja Desconocimiento al que contribuyen las campañas rosas que romanticizan estos procesos oncológicos y maquillan la realidad hasta convertirla en un cuento de princessas que van a ser salvadas por la marca de turno que donará una irisoria de ventiigadas.

Pocas cosas se me ocurren más antagónicas que el color rosa y el cáncer, ni de mama ni de cualquier otro tipo. Mientras que para nosotras y nuestra gente un diagnóstico de cáncer de mama significa que “el mundo se detiene” (otro libro recomendable, el de Juan Fueyo), para las marcas esta enfermedad ―y solo pasa con elcáncer de mamabre―t. oportunidades de negocio. no es culpa de mi madre teñir octubre de rosa y que nos entreguemos al consumismo. ¿Quién no tiene un caso de cáncer de mama o simplemente cáncer cerca de sí?

Abre los ojos, estamos aquí.

Las citas personales no tienen hijos ni relación. No somos las y los consumidores lo que tenemos que asumir una responsabilidad que a los poderes públicos, a los presupuestos públicos del Estado, de las autonomías y de los ayuntamientos. Si es de algún color es el marrón. Pregúnteselo a cualquiera de las mujeres que han pasado por esta enfermedad o que están pasado ella. La campaña Teta&Teta está producida en Canadá para Irene Baque y sus madres héroes.

Puede obtener información muy precisa sobre el cáncer de mama. Datos necesarios para la información preventiva, detección y personalización. Avances de henoSe han logrado muchos avances, pero las comunidades científica y médica no pueden explicar por qué los diagnósticos de cáncer de mama están aumentando a más del 12% desde principios de siglo y todavía son dispares en un 12%. ambientales (físicos, psicológicos y químicos), y también genéticos. Sin embargo, la mitad de las mujeres que padecen cáncer de mama no presentan ninguno de los factores de riesgo que habitualmente mencionan, muchos de ellos asociados al estilo de vida de las propias mujeres.

A pesar de saberlo, son cada vez más frecuentes (y subrayo la palabra) las campañas que ponen el peso de la prevención del cáncer sólo en ese estilo de vida. solo) solo comer sano y hacer ejercicio físico fuera suficiente para evitar tener cáncer o para que este no vuelva. En cambio, apenas se habla de la importancia de la existencia de regulaciones que controlen los factores ambientales a los que estamos expuestos involuntariamente todos los días y frenen la comercialización de que stanciasías s los supermercados.

Mientras haya campañas rosas que nos hagan sentir mejor con nuestra compra solidaria que salva a mujeres enfermas (pero valientes) será muy difícil hablar de la necesidad de que los Presupuestos del Estado destinen más dinero a la nueva inversión y a donar a instituciones especializadas. centros públicos de más recursos con un enfoque de integración. Tampoco habrá posibilidad de hablar en medio del frenesí y la fiesta rosa por el cáncer de mama de la importancia de formular políticas orientadas públicas a prevenir el cáncer de mama y que actúen sobre la base de lo que se sabeascica o de sabeascica agentes físicos y biológicos sospechosos de causar cáncer o que aumentan el riesgo de esta enfermedad.

Investigación e innovación y transformación social, sanitaria, social y económica en oncología. No puede depender de intereses empresariales y campañas de marketing que edulcoran la crudeza de una enfermedad como el cáncer y nos ponen a las mujeres con cáncer de mama a bailar ya saltar para que no decaiga la fiesta del lazo rosa. Como dice de Anne Boyer, autora del libro Desmorir“Es importante estudiar los genes relacionados con el riesgo de cáncer”. Quizás haya llegado el momento de otro reportaje sobre el cáncer de mama, un colectivo que nos diga que esta enfermedad no es culpa de quienes la padecen, sino de una sociedad capitalista, machista y belicosa que permite la enfermerostamosía. Quizás haya llegado el momento de colectivizar esta maldita enfermedad, de hablar de pandemia. No existe la del cácer, solo de mamá.