No hay más incendios forestales activos en el área metropolitana de Atenas, pero los funcionarios todavía están en alerta, dijo un portavoz del principal cuerpo de bomberos de Grecia.
Le dijo a la BBC que los bomberos continuarían extinguiendo el terreno y mantendrían una fuerte presencia en el área.
Los vientos más suaves y los grandes esfuerzos de los servicios de emergencia ayudaron a controlar el incendio.
Pero todavía existe el riesgo de explosiones debido a las ráfagas de viento y las temperaturas que superan los 30 ° C (86 ° F) durante el día.
Una mujer murió y decenas más, incluidos bomberos, resultaron heridos después de que los incendios arrasaron 100.000 hectáreas (40.470 acres) de tierra. Miles de residentes locales fueron evacuados.
Una enorme columna de humo que se cernía sobre Atenas durante horas se disipó el martes, pero el cielo todavía estaba brumoso.
Las autoridades griegas ahora están evaluando los daños y preparando planes para compensar a los residentes y empresas afectados.
Más de 700 bomberos, 199 camiones de bomberos y 35 aviones con bombas de agua participaron en la lucha contra el incendio, que estalló por primera vez el domingo por la tarde a unos 35 kilómetros (22 millas) al norte de la capital griega.
Hasta el lunes, se confirmaron incendios en 40 lugares diferentes, con llamas de hasta 25 metros (82 pies) de altura en algunas áreas.
Aunque los incendios han disminuido en gran medida, los bomberos continúan extinguiendo el terreno y mantienen una fuerte presencia en la región de la capital.
Los suburbios como Nea Penteli, Vrililia y Patima Halandriou se encuentran entre las zonas más afectadas.
Una residente de Nea Penteli, Marina, describió cómo se vio obligada a huir de su barrio en Nea Penteli a un pueblo cercano, sólo para ser evacuada por segunda vez cuando las llamas también llegaron allí.
“La casa de mi amigo probablemente lo perdió todo: ninguna pertenencia. Y mientras todo sucedía, incluso nuestra escuela se quemó. Todos nuestros recuerdos estaban allí”, le dijo a la BBC.
En Vrilisia, a sólo 14 kilómetros (8 millas) del centro de Atenas, edificios y negocios fueron envueltos en llamas.
El cuerpo de una mujer de 63 años fue encontrado en una fábrica en llamas en la cercana Patima Halandrio.
Sus colegas dijeron que ella tenía demasiado miedo para saltar del edificio cuando las llamas se acercaron y luego quedó atrapada dentro.
El primer ministro Kyriakos Mitsotakis acortó sus vacaciones para volver a afrontar la crisis.
Tras la activación del mecanismo mutuo de protección civil de la UE, países europeos como Italia, Francia, Serbia, España, la República Checa y Rumanía proporcionaron asistencia a Grecia, incluidos aviones, personal y ayuda.
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